Río Lagartos es un secreto guardado en la Península de Yucatán. Es un pequeño pueblo de pescadores en el lado norte de la Península en el estado de Yucatán. El pueblo es la entrada a una reserva de vida silvestre conocida como Ría Lagartos (Parque Natural Reserva Ría Lagartos).
Río Lagartos es un cuerpo de agua semi cerrado, conectado con el golfo de México por su parte occidental y es una mezcla de agua salada del océano con agua dulce de la tierra. Está lleno de manglares y mucha vida silvestre entre los que se pueden encontrar aves, reptiles y muchos peces. La extensión de la Ría es de aprox. 80 km2 con una superficie de 12,850 hectáreas.
El territorio actual donde se encuentra la reserva natural fue parte del cacicazgo de Ecab en tiempos prehispánicos y había un complejo portuario en el sitio arqueológico de Isla Cerritos.
Se estima que tuvo importantes intercambios comerciales con regiones de Guatemala, Belice, el interior de la Península de Yucatán, así como Costa Rica y el sureste de los Estados Unidos.
Las Coloradas es un pueblo realmente pequeño y cuenta con las Lagunas Rosadas de donde toma su nombre “Las Coloradas”.
La zona es fundamental para la conservación de varias especies. Por ejemplo, sus aguas son el único lugar de anidación del flamenco rosa del Caribe y un importante lugar de anidación de tortugas como la tortuga carey, en peligro crítico, y la tortuga verde. De hecho, los humedales cuentan con un número considerable de especies raras, vulnerables y en peligro, como la Rhyncholaelia digbyana.
También es un importante lugar de descanso para las aves migratorias, como la cigüeña de cuello negro, que pasa los inviernos en la región.
La zona ha sido durante mucho tiempo un destino ecoturístico, especialmente relacionado con la población de flamencos del Caribe y la anidación de tortugas marinas. En la última década se ha producido un aumento del 300% en los servicios turísticos, incluyendo hoteles, restaurantes y producción artesanal.
Por otro lado, cuenta con actividades tradicionales de pesca y extracción de sal, que se han ido ajustando a prácticas sostenibles. También cuenta con actividades agrícolas muy limitadas, en las que aún está presente una técnica prehispánica llamada ‘milpa’, que consiste en la tala y quema. Las ‘milpas’ producen principalmente maíz, frijoles, calabazas y pimientos.
